Deportes sorianos
JUEGOS ATLÉTICOS
CARRERAS:
El Diccionario de Autoridades las define como “la fiesta de parejas o apuestas que se hacen a pie o a caballo para diversión o para probar la ligereza”.
Carreras pedestres:
Las carreras pedestres en particular han tenido un gran desarrollo por toda España, pero quizá las zonas de más afición sean Aragón y País Vasco-Navarro.
Soria sin embargo, aún estando colindante con éstas zonas, ha carecido de buenos andarines. Los concursos suelen celebrarse en las fiestas patronales. Quién primero llega a la meta gana algún dinero donado por el ayuntamiento.
Se encuentra referencia escrita a éstas carreras, en el Diario La Voz de Soria, en varios pueblos de la provincia como Almenar con motivo de las fiestas en honor al Cautivo, (fecha variable) (1), el Royo, fiestas en honor de la Virgen y San Roque, el 16 de Agosto (2), Beratón, en honor de San Roque (3), Arcos de Jalón en las fiestas en honor al Cristo de la buena Muerte. (4)
También la revista Recuerda del mes de Abril de 1951, comenta la organización de carreras pedestres en la capital, con motivo de las fiestas de San José. (5)
En la actualidad se organizan carreras pedestres en muchos pueblos, igualmente con motivo de las fiestas patronales aunque tienen un sentido más deportivo.
Carreras de sacos:
Una variedad de las carreras pedestres son las carreras de sacos, frecuentes en las fiestas aldeanas. Se trata de recorrer enfundados en un saco hasta la cintura, una distancia fijada de antemano; gana quién primero llega a la meta.
El diario La Voz de Soria lo recoge en el pueblo de El Royo y la revista Recuerda, en la capital. (6)
Carreras de cintas:
Variedades más importantes y de mayor práctica son las carreras de cintas a caballo y posteriormente en bicicleta, que trataré más ampliamente en un capítulo posterior.
SALTOS:
De las distintas modalidades de saltos, sólo haré referencia del Salto de la Garrocha, por ser la única modalidad de la que tengo constancia. Es una suposición mía, que la modalidad de Salto de Longitud también debía realizarse, sobre todo a nivel de “chavales” y “mozos”, pues por ser esta una actividad tan natural y tan propicia al reto y la competición, resulta difícil no imaginar que esto ocurriera. Esto, repito, es solamente una especulación mía, sin el apoyo de pruebas fehacientes, pero acompañada del “sentido común”.
Salto de la Garrocha:
De todos los juegos recogidos, quizá sea éste el menos documentado, y del que menos testimonios he recibido. De todas las personas preguntadas, solamente una, Jovita Laguna Millán en el pueblo de Hinojosa del Campo, pero refiriéndose a su pueblo natal Villar del Campo ha sabido darme razón de este juego, por habérselo oído comentar a su padre, pastor de profesión.
Referencia escrita, he encontrado en el Diario La Voz de Soria, sobre unos concursos hechos en el pueblo de Hinojosa del Campo, con motivo de las fiestas patronales de San Isidro.
Era ésta una actividad llevada a cabo por los pastores, que en su trabajo precisaban a veces superar arroyos y desigualdades del terreno, empleando para ello la “garrocha” o el bastón que portaban, a modo de pértiga.
Del paso de actividad laboral a juego o competición, no mediaba más que un reto o una apuesta, pasando de ser pura necesidad, a motivo de superación o diversión.
Consistía la “garrocha” en una vara larga de madera, generalmente de haya, con una longitud de 2 metros o un poco más, y con un grosor de 5 ó 6 cm.
La finalidad del juego era saltar lo más lejos posible, ganando claro está, el que lo conseguía. Para ello, se utilizaba una técnica similar a la empleada actualmente en el salto con pértiga, pero con la particularidad de ser “la garrocha” un elemento rígido. Existía una forma de agarrar, una carrera de impulso, una toma de contacto de la vara con el suelo, un vuelo y una caída, todo ello similar a la técnica actual, excepto el vuelo y la caída, que era de pie.
LANZAMIENTOS:
Tiro de Barra.
El Diccionario de Autoridades lo define como “género de diversión que para excitar la robustez y agilidad suelen tener los mozos; y desde un puesto señalado despedirla de diferentes modos y maneras y gana el que más adelante su tiro, suponiendo que para que lo sea ha de prender en la tierra su punta o parte inferior”. (Lámina 4) Pág. 31
Es éste un juego que solamente queda en el recuerdo de las personas de más edad. En todos los lugares donde me han hablado de él, me han hecho referencia al mucho tiempo que lleva sin practicarse, fijándolo casi siempre por encima de los cuarenta años. En algunos sitios como Tardelcuende, los ancianos no lo habían practicado nunca, pero siendo ellos “chavales” lo habían visto jugar a sus mayores. Esto puede dar idea del tiempo que lleva en el olvido.
El D.G.E. lo documenta en Soria en el pueblo de Benamira, aunque lo he encontrado en otros, como por ejemplo, La Seca, Vinuesa, Quintana Redonda, Tardelcuende, Gomara, Almenar, Señuela, y las Cuevas de Soria.
Elemento utilizado
Se empleaba una barra de unos 80 cm. de larga y con un peso que oscilaba entre los 5 y6 Kg. La barra era de hierro y la parte inferior, estaba ligeramente afilada para que se clavara al caer en el suelo.
En el pueblo de Las Cuevas de Soria, “Manolo” me refería que después de que desapareciera la última barra que tuvieron en el pueblo, construyeron algunas con madera de roble, pero no tenían las mismas cualidades para el juego que las de hierro.
Otro detalle a tener en cuenta, es que esta barra no constituía ninguna herramienta de trabajo, sino que se construía exclusivamente con la finalidad del juego. (Lámina 5) Pág. 33.
Desarrollo del juego.
El lanzamiento se realizaba por detrás de una línea que se trazaba en el suelo.
Para conocer su técnica, sigamos a F. Pedregal en su obra “La educación gimnástica”: “Teniendo la barra cogida por su mitad con la mano derecha, se hace medio giro a éste costado, llevando el pie derecho, 8 ó 10 cm. a retaguardia del izquierdo y un poco a la derecha, procurando que quede la barra en posición vertical, el brazo izquierdo al frente con la mano abierta, las rodillas dobladas, y el peso del cuerpo repartido en las dos piernas. Describiendo con brío y con el brazo extendido, un semicírculo de atrás a delante con la barra, de modo que ésta no pierda la verticalidad, a lo cual ayuda la mano izquierda, repetir el movimiento 2 ó 3 veces a lo sumo, y lanzar la barra de frente con la mayor fuerza y lo más distante posible”. (8)
En el pueblo de Las Cuevas de Soria, el estilo empleado era el explicado por F. Pedregal, con la aclaración al texto anterior, de que se lanzaba de frente y con las piernas separadas, cosa que aunque se adivina, no queda muy clara en el texto.
En los demás pueblos donde he encontrado referencia de este juego, la técnica era la misma, pero el lanzamiento se hacía de perfil.
Para ejecutar el lanzamiento, en el pueblo de Las Cuevas de Soria, hacían unos hoyos pequeños, donde metían las puntas de los pies, ya que como hacían el lanzamiento de frente, la inercia creada por impulso dado a la barra, podía hacerles, si no caer hacia delante, sí adelantar un pie y pisar la línea del suelo, lo que suponía invalidar el lanzamiento, dándolo por perdido. En los demás lugares, no se hacían los hoyos, pues al lanzar la barra de perfil, frena el pie delantero, cualquier posible desequilibrio hacia delante.
Las únicas reglas del luego, eran la dicha anteriormente de lanzar por detrás de la línea del suelo, y que la barra debía tocar el suelo en su caída, con su extremo inferior, quedando clavada a ser posible.
Cumplidas estas reglas, el vencedor era el que más distante lanzaba la barra.
Comments are closed